lunes, 15 de septiembre de 2014

INTERMEDIO: La respuesta oficial

El sargento Calhoun, de la policía metropolitana, era un hombre que había conseguido todo lo que se había propuesto en la vida mediante la sencilla premisa de no hacer preguntas. Aunque esto parecería contrario a su profesión, lo cierto era que no convenía molestar a ciertas personas en  aquella ciudad. Por esta razón se le daban a él los casos que se debían resolver rápidamente, lo que le había hecho ascender hasta su actual posición de sargento. El problema que tenía Calhoun en este momento era que no paraban de asediarle la cabeza preguntas sobre el señor Azul ¿Por qué había encontrado una pistola perfectamente a la vista en su piso? ¿Qué le había hecho salir por la ventana, sabiendo que sus vecinos le verían y llamarían a la policía? ¿Por qué, según testigos, había vuelto a entrar a los pocos segundos para luego volver a irse precipitadamente?...
Todo esto y más había estado atormentándole a lo largo del día. Cuando se preparaba para irse a su casa y ver a su esposa e hijos estas preguntas no habían dejado de preocuparle, ya que parecía que Azul estaba dispuesto a hacer alguna tontería que podría hacer daño a alguien. Repentinamente un grupo de gente entró a la comisaría, lo que le sacó de su ensimismamiento.
-Parece que vienen de una buena pelea-Le comentó a un compañero suyo que traía a cuatro detenidos.
-Estos tres, que han intentado matar a su compañero. Por lo visto son de la banda de Rouge.
-Eso no puede ser bueno…
-Y va a ser peor. Por lo que me he podido enterar, le estaban machacando porque le han robado a Victor Rouge.
Un escalofrío recorrió la espalda de Calhoun cuando le vino la idea de que secuestrar a ese niño entraba en la definición de “tontería que podría dañar a muchos”. –Hazme el favor de mantenerme informado de esto- le dijo antes de salir de la comisaría.
La inquietud de Calhoun no haría más que aumentar cuando, al día siguiente, una llamada anónima le avisó de que un tal Pedro Gómez (o José García, no quedaba muy claro) había asaltado una oficina cerca de unos estudios de grabación y que en ese momento tropas de los Rouge le estaban tiroteando. Tras una frenética carrera hasta la dirección que le habían dado, llegó al edificio de oficinas e inspeccionó la zona. Efectivamente alguien había estado disparando allí, pero no había marcas de sangre por ninguna parte. ¿Cómo sería posible que alguien sobreviviera a esto? Un hombre menudo con dos guardaespaldas enormes salió del edificio y se dirigió al sargento.
-Dijo que se llamaba José García. Me pidió que le dijera que tiene al niño y que lo usará para acabar con los Rouge.
-¿Sabe qué va a hacer con él? ¿Cómo consiguió secuestrar al hijo del señor Rouge?

- No dijo mucho, salvo que se lo había quitado  a un hombre llamado Azul, antes de matarle.

1 comentario:

  1. Después de este corto intermedio llega un muevo capítulo...¡Titulado intermedio! Espero que las cosas se vayan normalizando poco a poco estos días, pero hasta entonces la continuación de la historia del Plan C corre a cargo de RuVerMan. Tienes hasta antes del Lunes que viene para publicar.

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